Y tú ¿pronas o supinas?

El deporte se está convirtiendo en algo muy complicado últimamente. Hacer deporte, quiero decir. Lo de estar en el sofá comiendo ganchitos mientras sudan otros no cuenta, no sé si lo sabéis.

Antes, uno quería correr y todo lo que tenía que hacer era ponerse unas zapatillas de deporte y salir a la calle (aunque mejor si además llevabas pantalón corto y camiseta, porque si ibas en vaqueros parecía es que habías perdido el autobús, eso sí). Habéis visto el concepto ¿no?: zapatillas de deporte. Eso no existe ya, claro.

En algún momento del pasado (y creo que fue cuando la gente empezó a poner en su currículum que tenía nivel de inglés 'medio alto') se inventó el footing. Que a mí esto es una cosa que me fascina de España, que como no sabemos inglés, nos lo inventamos (y de esto ya hablé en otro post -ver apartado actualización). El caso es que desde que se inventó el footing, uno ya no podía salir a correr con unas zapatillas normales sin que viniera alguien y te dijera:

-¿Qué haces con esas zapatillas?

-Pues correr ¿no lo ves?

-Pero animal, ¿no ves que son de tenis?

-¿Y qué pasa, que los de tenis juegan sentados o qué?

Pero esto era antes. Porque ahora los publicistas ya han ido a academias de inglés buenas y ya saben que en inglés correr se dice 'run', así que se ha inventado el 'running' que es lo mismo, pero con zapatillas más llamativas (yo calculo que en unos 10 años o así los publicistas se enterarán de que lo que hace la gente normalmente, que es trotar, se viene llamando 'jogging' desde los años sesenta).

Hoy he ido a una tienda especializada en deportes con la intención de comprarme unas zapatillas, más que nada porque las que vengo usando parece que me las he encontrado en un contenedor. He perdido unos diez minutos buscando la sección de 'zapatillas' hasta que me he dado cuenta de que no hay una sección de 'zapatillas', en esas tiendas las cosas van por deportes. He estado a punto de preguntar por la sección de 'correr despacito de vez en cuando para compensar la mala conciencia de los excesos de cerveza y pizza del fin de semana', pero menos mal que no lo he hecho porque al parecer no están tan especializados. Todavía.

Llego a la sección de 'running'. Hay como doscientos pares de zapatillas con una riqueza cromática capaz de producirle ataques epilépticos a una piedra. Decido preguntar.

-Hola, estaba buscando unas zapatillas para correr.

-Ah, de acuerdo  ¿Sobre qué superficie corres normalmente?

-¿Yo? Sobre el suelo. He probado por las paredes, pero me canso mucho más.

-Jaja... no, me refiero al material.

-Ah, haberlo preguntado antes. Merengue de limón ¿hay algo mejor?

Bien, al parecer se puede correr sobre cosas distintas. Que debe ser como la gente esa que va por la calle tratando de no pisar las rayas de las baldosas ¿no? '-Oye, ¿por qué vas haciendo el pino por la calle? -Es que estas zapatillas son de tierra, y hasta que no salga del asfalto no puedo usarlas...' Madre mía.

Pero hay una cosa mejor. Tienes que saber cuántas veces las vas a usar.

-¿Cómo?

-Que cuántas veces vas a salir a correr.

-Pues no sé. Dos o tres veces.

-¿Dos o tres veces a la semana?

-¿A la semana? Ah, pensé que decías antes de cansarme y dejarlas tiradas en el trastero. Mmm... vale, pongamos una, entonces. O media, igual.


Al parecer, el campo de las zapatillas se ha especializado tanto que ya hacen modelos distintos para según como corres.

-¿Y cómo pisas?

-Pues con un pie y luego con el otro. Y así voy repitiendo todo el rato hasta que paro. Es importante no confundirse en la alternancia porque te puedes caer, que eso ya lo he aprendido.

-No, que digo que si eres pronador o supinador

-Oye, ¿te doy el teléfono de mi madre y hablas con ella? Es que igual te puede dar más datos...

Al parecer, ya no  puedes ir a una tienda y comprar unas zapatillas porque te parecen bonitas o cómodas. Al parecer es el fabricante de zapatillas el que decide qué tipo de zapatilla te vas a poner. Y oye, si luego resulta que son naranja fluorescente con lunares rosas te aguantas. ¿Quién va a saber más lo que necesitas, tú o un montón de niños en una fábrica de Tailandia o el jefe de diseño del departamento de biómecánica de Saucony, Asics o Mizuno*? Pues entonces.

Al final me he comprado las zapatillas más feas que he visto, usando el razonamiento de que si hacen unas zapatillas tan feas y la gente las compra, es que deben de ser buenas (bueno, por eso y porque tenían descuento, lo que reconozco que contradice un poco mi razonamiento anterior).

Eso sí, luego he buscado en internet para ver de qué coño son. Al parecer son ideales para corredores ligeros que hacen carreras cortas a ritmo rápido. Que no tenía ni idea de que se fabricaban zapatillas para ladrones de bolsos...

No son estas. Llamadme afortunado, pero he encontrado unas todavía más feas. Sé que me envidiáis...

*Para el que no lo sepa, son marcas de zapatillas. De las buenas, además. Ahora llevar Nike o Adidas es de pobres, por lo que se ve...


ACTUALIZACIÓN: En vista de que no iba a dedicarme a esprintar después de robar bolsos a ancianas, he terminado por cambiar las zapatillas que había comprado por otras más acordes con mi actividad habitual (y no, no son unas de felpa a cuadros). En mi decisión final ha sido de enorme ayuda el blog de Gadgets para Correr, por lo que me gustaría remitir allí a aquellos que estén planteándose comprar algo que no sean las típicas Nike Pegasus. O bueno, si lo hacen, que sepan al menos lo que están comprando.