martes, 28 de abril de 2009

De la sinceridad.

La sinceridad está sobrevalorada. Una persona sincera es aquella que te dice "Te voy a decir una cosa, pero que no te sepa mal". Que es para contestar: "pues yo te voy a dar un puñetazo, pero que no te haga daño". Total, viene a ser lo mismo, ¿no?

Una persona sincera es a la que le preguntas su opinión por esos pantalones carísimos que te has comprado... y te contesta que son bonitos, pero te hacen el culo gordo. Que lo mismo tú ya sabías que tienes el culo gordo, que para eso lo llevas encima todo el día. Bueno, o a lo mejor no, porque claro, el culo está en una zona de difícil acceso para uno mismo, pero éste sería otro tema. El caso es que cuando alguien le pide opinión a otra persona, normalmente no quiere una opinión sincera: quiere que le mientan. "Mira lo que me he comprado, ¿a que es bonito?" Es algo que debería saber todo el mundo, se tendría que dar en el colegio. Como que cuando le preguntas a alguien "¿Que tal?" no quieres que te lo cuente, sólo es una manera de saludar. Es que no hay una forma de saludo que sea "no soy lo bastante antipático como para no saludarte, pero no he tomado suficiente café como para que no odie a la humanidad, así que ni me hables" (si, éste soy yo por las mañanas; me despierto con un malhumor encantador). O mejor aún "Te saludo para no parecer imbécil, pero la verdad es que no me interesas tanto como para que quiera que me hables". La semántica es una ciencia a la que le queda mucho por avanzar. Es que faltan palabras.

Pero hay unos sinceros todavía peores: son los que no esperan a que les preguntes. "¿Huy, te estás dejando barba? Pues no te queda bien, te hace mayor". Pues mira, gracias por el consejo estético, pero a ti te queda fatal esa cara y yo no te lo digo. Además, no me estoy dejando barba, es que no me afeito, que no es lo mismo.

Es que para estas cosas hace falta confianza, lo que pasa es que los sinceros eso no lo tienen en cuenta. Claaaro, como la sinceridad tiene buena prensa... Uno puede ir por ahí diciendo "Yo es que soy muy sincero", y aunque sea mentira queda estupendamente. Ahora sal por ahí y ves diciendo "No, yo soy mucho más de contar mentiras" y a ver como te mira la gente. Pues ese al menos sabes que te está siendo sincero (de hecho si no lo fuera se daría una paradoja lógica que podría destruir el universo; o como mínimo, provocar discursiones filosóficas bastante absurdas).

Uno pensaría que la mentira es un invento de Satán, que pretende con ello sembrar el caos y la destrucción en el mundo de los mortales, pero que va. Resulta que según la biblia, la inventaron Adán y Eva, ahí es nada. Esto vendría a demostrar que la mentira es mucho más necesaria para la humanidad que la imprenta, la penicilina, o el tanga brasileño, que parece que son muy necesarios pero tardaron mucho más en inventarse (iba a decir también la rueda, pero es que no le acabo de ver la utilidad hasta que se inventó el resto del coche, la verdad).

Fue justo después de que se dieran un atracón de manzanas del Árbol de la Sabiduria -que a mi este nombre me parece un claro ejemplo de publicidad engañosa, pero ya llegaré a esto- cuando aparece Dios y se da la siguiente escena:

-¿Que tal, chavales? ¿Todo bien?

-Pues no nos podemos quejar, la verdad. Es lo que tiene estar en el paraíso, todo el día tocándose las bolas...

-Me alegro, me alegro... Estooo... qué os iba yo a comentar... vosotros no habréis estado comiendo del árbol de la sabiduría, verdad? Lo digo más que nada por que está esto perdido de tronchos de manzana...

-¿Nosotros? Que va, que va... Se nos ha pasado por la cabeza, ésta es la verdad, pero al final nos hemos pedido unas pizzas. Es que Eva dice que a ella las manzanas le estriñen un montón... seguro que ha sido la serpiente, pero ni le preguntes porque es muy mentirosa y te va ha decir que no .

Que también hay que ser tonto para mentirle a un tío que: a) es omnipotente (es decir, que funciona tanto a 125 como a 220v), b) tiene una mala leche que lo flipas (no hay más que leer el antiguo testamento par verlo), y c) tiene un segurata con una espada de fuego (vamos, como Darth Vader pero en antiguo). Que digo yo que mucha sabiduría no darían las manzanas esas.

Y es que la sinceridad no da más que problemas. Es como si sales a ligar y te acercas a una chica diciendo: "Mira que me te he estado mirando un rato, aunque la mayoría del tiempo no a la cara, la verdad, y me apetece un montón irme a la cama contigo. Pero solo esta noche, eso sí. Es que paso de comprometerme ¿sabes?" Igual es cosa mía, pero como técnica de ligue, no le veo mucho futuro. Ahora, que lo mismo funciona, que con las mujeres uno nunca sabe. Es que son raritas hasta decir basta, pero éste seria otro tema.

Tu mejor amigo te presenta a su nueva novia y te pregunta tu opinión. ¿Qué vas a decirle? "¿Si no fuera tan bajita pensaría que es un orco?". Pues no, te callas y le dices que parece maja. Como mucho le puedes decir que hacen buena pareja, pero eso con cuidado, porque seguramente él también tenga ojos en la cara y se lo puede tomar a coña.

Habéis quedado para cenar y tu chica sale del cuarto de baño para preguntarte: "¿Cómo me queda esta blusa roja con los pantalones verdes?". Tu piensas: "teniendo en cuenta que hace quince minutos que tendríamos que estar allí y que ya necesitaría un DeLorean para llegar a tiempo, yo diría que esa combinación es perfecta. Y si hubieras salido en bragas y con un gato muerto en la cabeza, lo seguiría siendo." ¿Se lo dices? Pues no. Le dices algo como "Ahora sí que estás perfecta; yo no cambiaría nada". Pero ni se te ocurra añadir "¿Podemos salir ya?" porque como sospeche que no has sido completamente sincero, lo mismo le da por cambiarse toda la ropa de nuevo, aunque solo sea por vengarse.

Y es que mentir en sí no tiene nada malo. Lo chungo es que te pillen. Así que amigos hacedme caso y mentid. Porque dicen que el cementerio está lleno de buenas intenciones, pero es mentira: de lo que está lleno es de sinceros.

Y aún quedan demasiados.

5 comentarios:

Barbijaputa dijo...

Deberías escribir los monólogos para la Paramount, Human.


XDDDD

ender dijo...

Todo esto lo sabes por experiencia, ¿verdad? Se te ve muy puesto en el tema.

Blanco Humano dijo...

Barbi: Nada, nada, tú que me miras con buenos ojos, ya me gustaría a mí ser tan gracioso. Es que me crié viendo a Buenafuente y algo de influencia se tiene que notar. De todas formas teniendo talento lo hace cualquiera, lo que tiene mérito es lo mío.

Ender: en absoluto. Yo no miento nunca. Lo que hago a veces es ocultar información, pero eso es distinto. Es que soy más bien reservado.

De todas formas mi absoluta carencia de memoria me impide mentir con eficacia, me pillarían siempre.

Barbijaputa dijo...

>>De todas formas teniendo talento lo hace cualquiera, lo que tiene mérito es lo mío.



XDDDD Casémonos Human!!

Blanco Humano dijo...

Sabes que tienes mi amor incondicional, no lo estropeemos con convenciones sociales.
Bueno espera, podemos practicar sexo en abundancia, contra eso no tengo nada. De hecho, incluso me gusta la idea...