La organización secreta maligna para la que trabajo -de la que, por motivos obvios, no puedo decir el nombre... cof-cof..(spectra)- es un ejemplo de coordinación en el trabajo. Hasta tal punto eso es así, que incluso el servicio de limpieza funciona de manera coordinada y con británica puntualidad. Todos los días, y de forma simultánea un ejército de empleadas de limpieza procede a limpiar los servicios de todas las plantas del edificio con profesional pulcritud.
Y ¿cómo es posible tal coordinación?, os preguntaréis vosotros.
Pues esta es la mejor parte. Al parecer, cuando pasé el reconocimiento médico de rigor al entrar en la empresa, me fue insertado un receptor biométrico en la vejiga que advierte al servicio de limpieza el momento justo en que han de dejar de ser operativos todos los urinarios del edificio. Yo es que otra explicación, no le veo.
Gracias a Dios que hay macetas.
Ningún animal a sufrido daño durante la realización de este post. Bueno, algo es algo, ¿no?.
12 comentarios:
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(Esto no es un comentario, es que a veces tengo que escribir dos veces para que me salga la opción de "enviar por correo electrónico comentarios de seguimiento". Creo que pasa cada vez que cierro el ordenador, que desaparecen mi datos supongo y tengo que volver a meterlos. Pero es sólo una suposición. Repito, esto no es un comentario)
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¡Esto no es un simulacro de comentario!
Vale, estáis locas las dos, quiero que lo sepáis.
Y esto no es una respuesta a ningún comentario.
¡Pero nos queremos!
No estamos locas, es que somos una sola persona con dos blogs, y hacemos el paripé de contestarnos entre nosotras, pero qué va...
Porque Barbijaputa va a ser la futura madre de mis hijos que si no diría que estáis tronadas las dos...
Dilo de todos modos. No nos va a importar.
¿Estás embarazado de Barbi? De lo que se entera uno...
Soy así de semental, y tú ten cuidado, que con mirarte te hago un bombo.
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